El Mejor Oro Comestible

Quieres acompañar tus platos con todo el glamour y el lujo que se merecen, y sabes que para ello no hay nada mejor que decorarlos con uno de los elementos más valiosos que existen: el oro. Convierte tu cocina en el laboratorio de un alquimista y descubre el secreto para que tus recetas deslumbren con el preciado metal.

El oro como elemento alimenticio ya se usaba en el antiguo Egipto mezclado con pan que se empleaba como ofrenda a los dioses por sus cualidades mágicas . Los alimentos de los simples mortales no eran aptos para un dios y por ello se rellenaban con este valioso metal. Esta búsqueda de “revalorización” de los alimentos, es el mismo motivo que subyace bajo el uso actual del oro en la restauración, adornar la comida para conferirles un valor superior.

La cocina es un arte culinario que no sólo se basa en el aspecto olfativo y gustativo, como todo buen chef sabe, lo visual juega un papel fundamental en cómo la comida es percibida. Por ello, la comida es bañada o adornada con oro para aumentar su atractivo y la percepción de su valor gastronómico.

Es una magnífica forma de que tus platos luzcan de una forma especial, y sin duda hará las delicias de tus comensales. Se sentirán sorprendidos y agasajados por tan exclusiva forma de cocina preparada para ellos.

Es muy común preguntarse a qué sabe el oro comestible. La respuesta es que no aporta sabor a tus comidas y tampoco textura (en su forma de hojuelas), se usa principalmente como colorante alimentario por su valor estético. Aunque no es común, algunas marcas tienen versiones mezcladas con saborizantes como vainilla, trufa blanca u otras. Se puede encontrar en varios formatos como polvo, copos (flakes), pintura líquida, spray, estrellas y por supuesto en su forma más conocida, las láminas u hojas.

Puede ser usado en repostería, postres, helados y bombones, siendo el chocolate el color cuyo contraste resalta su presencia. Es habitual encontrarlo en bebidas como champagne, cava o cualquier vino espumoso y menos frecuentemente en aceite, para hacerlos parecer productos más selectos.

También es habitual encontrarlos en tratamientos de estética y como parte de maquillajes de fantasía. Como podrás ver un poco más abajo, el oro es totalmente seguro y no es tóxico para el organismo.

¿Cómo se hace el pan de oro comestible?

Al igual que el pan de oro, el oro comestible se fabrica a partir de pepitas de oro de gran pureza (habitualmente de 24 quilates) que son fundidas para crear un lingote. Este lingote será posteriormente prensado hasta adquirir forma de lámina o papel del grosor aproximado de un cabello.

Mil de esas láminas se colocan unas encima de otras sobre u plástico y se baten hasta disminuir todavía más su espesor. Luego se cortan en hojas cuadradas que es el formato habitual en que podemos encontrarlas. Su espesor es el mínimo preciso para decorar usando la menor cantidad posible. Esto permite que sea un elemento más barato de lo que suele pensarse.

¿Es malo para la salud el oro comestible?

Una de las mayores preocupaciones que existen es saber si comer oro hace daño o es tóxico para el organismo. Aunque el oro es un metal y hay quien piensa que es perjudicial, es un metal noble químicamente inerte y antialérgico que no es asimilado a su paso por el cuerpo.

Este temor nace de que hay estudios que relacionan su uso de forma medicinal con un cierto porcentaje de personas que pueden presentar un cuadro de intoxicación ante la ingesta de sales de oro.

Sin embargo, el oro ha sido usado desde hace mucho tiempo en medicina, y uno de sus beneficios principales es la de servir de tratamiento en casos reumáticos por sus propiedades anti inflamatorias. Este tipo de terapia se la conoce como crisoterapia o auroterapia y hace uso de estas sales, no del oro en su forma más pura.

Tanto en la Unión Europea como en Estados Unidos, su uso ha sido aprobado y se han realizado estudios sobre su inocuidad. El pan de oro comestible es de hecho un aditivo registrado como E-175 que puede encontrarse en productos elaborados por la industria alimentaria.